Deteniéndose para rescatar fauna herida. Abastecimiento de un negocio local o indígena. Elegir un equipo que consuma menos energía y reduzca los costos. Las personas de nuestra compañía toman decisiones, todos los días para ayudar a avanzar en sustentabilidad y, a lo largo de los años, la sustentabilidad se ha convertido en un valor fundamental y parte de nuestro ADN.
Nuestra estrategia de sustentabilidad se estableció oficialmente en 2010, cuando creamos objetivos a corto plazo para 2015 y objetivos a largo plazo para 2030 en seis áreas prioritarias: Biodiversidad y Ecosistemas, Energía, Comunidad, Agua, Administración de Materiales y Nuestra Gente.
Para 2015, habíamos alcanzado los 28 objetivos a corto plazo en las seis esferas prioritarias. Al mismo tiempo, actualizamos nuestra estrategia estableciendo nuevos objetivos a corto plazo para 2020, revisando nuestros objetivos a largo plazo para 2030 y nuestras declaraciones de visión, integrando el aire en la estrategia y haciendo hincapié en el cambio climático como parte de nuestro enfoque en la energía.
Nuestro trabajo en sustentabilidad nos ha distinguido de nuestros pares de varias maneras. Nuestras operaciones mineras, por ejemplo, tienen algunas de las emisiones de carbono más bajas del mundo. Hemos reducido nuestro consumo de energía y, a su vez, nuestros costos. Hemos ayudado a preservar grandes extensiones de hábitat de vida silvestre crítica en Columbia Británica y Alberta. Y nuestro compromiso de reducir el consumo de agua dulce nos ha ayudado a ser pioneros en la construcción de una planta desalinizadora a gran escala en nuestro proyecto QB2.
Incluso con estos ambiciosos esfuerzos, las prioridades para inversionistas, gobiernos y comunidades son dinámicas y evolucionan. Las compañías están siendo evaluadas en lo que respecta a la sustentabilidad. A medida que nos acercamos al 2020, reconocemos la necesidad de volver a visualizar nuestras metas y estrategia de sustentabilidad. Para responder a las crecientes expectativas de dentro y fuera de la compañía, queremos asegurarnos de que nuestra estrategia sea lo suficientemente ambiciosa como para ayudar a Teck a seguir siendo líder, reducir los costos de largo plazo asociados a riesgos mayores, y crear valor para los accionistas. También queremos demostrar a otros -tanto dentro como fuera de nuestra industria- lo que es posible. Para establecer esta nueva estrategia, hemos lanzado un proyecto que llamamos Teck2040.
Teck2040 busca construir sobre nuestro éxito existente y establecer nuevas metas que se integren aún más en todo el negocio. A través de Teck2040, aprovecharemos el conocimiento y la experiencia que existe en toda la compañía para integrar aún más la sustentabilidad como un valor y, en última instancia, garantizar el éxito a largo plazo de Teck. Se trata de la sustentabilidad de nuestro negocio en términos de desempeño ambiental, aceptación social y bienestar financiero. Teck2040 sustenta nuestra capacidad de crear valor para los accionistas y la sociedad. El progreso en Teck2040 está en marcha, y estamos trabajando para lanzar las nuevas metas en marzo de 2020.
Teck2040 se guía y responde a una amplia gama de tendencias, incluyendo las siguientes:
1. La urbanización y la clase media global
Para 2050, el número de personas que viven en ciudades de todo el mundo aumentará en 2.500 millones, y la gran mayoría del crecimiento urbano tendrá lugar en India, China y África. Muchos de estos habitantes urbanos formarán parte de una nueva clase media global de más de seis mil millones de personas, cuyo poder adquisitivo cambiará la demanda global y pondrá más presión sobre los recursos finitos.
En este momento, la persona promedio en la India usa menos de medio kilogramo de cobre por persona por año, mientras que, en Canadá, el promedio se aproxima más a los 5 kilogramos. A medida que la clase media de la India crece, también lo hará la demanda de cobre, acero y otros productos esenciales.
2. Expectativas Sociales
El auge de los medios de comunicación social ha permitido que la información se vea y comparta casi instantáneamente, lo que ha aumentado en gran medida el poder de los movimientos impulsados por los ciudadanos y los consumidores en todo el mundo. Los gobiernos y la industria están cada vez más sujetos a normas ambientales y éticas más estrictas, y están respondiendo a expectativas cambiantes. Muchas compañías están buscando formas de reducir su huella ambiental que requieren más productos bajos en carbono, impulsando así la demanda de producción de cobre en un 7%, de níquel en un 108% y de litio en un enorme 965% para el año 2050.
3. Transformación tecnológica
Los avances tecnológicos continuarán alterando la forma en que vivimos e interactuamos con el mundo que nos rodea. Tecnologías disruptivas, como Uber y Airbnb, y los avances en la tecnología 5G y de cadenas de bloques, están liberando una mayor eficiencia en todos los aspectos de la vida empresarial y doméstica. Los vehículos autónomos y mayor crecimiento en la inteligencia artificial y el aprendizaje de máquinas seguramente traerán beneficios a otras áreas de la vida.
4. Umbrales Ambientales y Cambio Climático
A medida que los efectos del cambio climático siguen manifestándose, la adopción de medidas para reducir las emisiones seguirá siendo una prioridad. Incluso con acciones agresivas, las sociedades y el medio ambiente pueden sentir los impactos negativos de un clima cambiante. Para 2050, el aumento del nivel del mar, la escasez de agua y los fenómenos meteorológicos contribuirán a que hasta 140 millones de migrantes climáticos se desplacen más allá de sus fronteras. El cambio climático y otras cuestiones como la crisis mundial de los plásticos y los residuos requieren la cooperación entre los gobiernos, la industria y la sociedad, con el fin de repensar nuestra forma de vida.
